RESEÑA HISTÓRICA DE LA PARROQUIA DE SALENTO

POR: Sebastián Mauricio Rodríguez Padilla, Miembro Correspondiente Academia de Historia del Quindío - Vigía del Patrimonio Cultural de Salento.

Los primeros datos de la parroquia de Salento, la primera de la región del Quindío, provienen según el decreto No. 1412 de julio 15 de 1842, sobre la composición y mejora del camino del Quindío y firmado por el entonces presidente de la República Gral. Pedro Alcántara Herrán, en la cual reza en sus artículos 17 y 18 sobre la fundación de una nueva población:

"Articulo 17.- los gobernadores de Mariquita y del Cauca, oído el informe del director del camino y después de haber hecho ejecutar los reconocimientos y observaciones que crean convenientes, designarán cada uno en la parte del camino que le corresponda, el sitio en el que debe erigirse una nueva población, la que ha de levantarse a este lado de la montaña está a una distancia de seis a ocho leguas de Ibagué e igual distancia de Cartago la que debe crearse en el lado opuesto".

"Artículo 19.- El respectivo gobernador demarcará la plaza, calles y solares en que deben edificarse la iglesia Parroquial, el cementerio, la cárcel y la escuela de primeras letras".

Más tarde, el 29 de mayo de 1846, a través del decreto No. 1681, se asigna congruas a las poblaciones de Valdecina, Boquia y Cabal y se establece definitivamente la parroquia:

"Artículo 2º.- Se destinan también del Tesoro Nacional hasta dos mil pesos para la construcción de las Iglesias de Valdecina y Boquía, y hasta seiscientos pesos para compra de herramientas, muebles y demás cosas necesarias para el culto y administración de los Sacramentos en dichas poblaciones."

Es así que en diciembre de 1849, dos años después de la expedición del decreto, vino el presbítero Casimiro Gamba y ofició la primera misa en el Alto del Roble, después y por autorización de las altas autoridades eclesiásticas de la época, se abrió los libros parroquiales y procedió a realizar los primeros bautizos y matrimonio.

La primera partida de bautismo existente en los archivos eclesiásticos de la parroquia data del 20 de diciembre de 1849 y dice:

"En esta nueva aldea de Boquía, a veinte de diciembre de mil ochocientos cuarenta i nueve, yo el cura propio Presbítero Casimiro Gamba, bauticé privadamente por falta de iglesia a una niña que nació ayer, a quien puse por nombre Maria Luiza hija legítima de Diego Castrillón i Brígida Espinal vecinos de esta aldea; i el primero hijo legítimo de los finados Salvador Castrillón vecino que fue de San Vicente (Provincia de Antioquia), i de María Antonia Meario vecina que fue de Salamina (Prov.a idem); la segunda hija legítima de Bruno Espinal i Pola Osorio, vecinos de Yarumal (Prov.a de Antioquia). Fue su madrina Concepción Salazar vecina de esta feligresía. Lo que testifico i firmo.

El Cura CASIMIRO GAMBA S".

Luego se oficiaba el primer matrimonio entre Crisanto Hernández con Ana Idárraga el 7 de Enero de 1850. A los pocos meses y cuando la aldea de Boquía empezaba a decaer en población, el padre Gamba inexplicablemente se retira de la parroquia el 1 de Abril de 1851. Los vecinos empezaron a solicitar al obispo de Popayán la presencia de un nuevo párroco, fue entonces que llegó el presbítero Fulgencio del Castillo a asumir las riendas de la parroquia, en calidad de encargado, hasta que el prelado diocesano decide nombrar al presbítero Parménides Velasco como párroco en propiedad.

La primera construcción del templo, en la primera aldea de Boquía y de acuerdo con registros de la época, fue en una choza de paja adecuada como capilla y en la cual llevó el nombre de Nuestra Señora de los Dolores. Luego y cuando los pobladores de la aldea de Boquía resolvieron, entre 1850 a 1861, trasladar el poblado hacia la parte alta, en el tambo de "Barcinales" (Actual ubicación del casco urbano de Salento), se traslada también la parroquia y empieza inicialmente a construirse una capilla, en la cual según los relatos de Edouard André, consignados en el libro América Pintoresca, cuando él llega a Salento el 10 de marzo de 1876 cuenta del estado de la capilla de esta manera:

"La iglesia de Salento, construida por los años de 1850, es un edificio único en su género, pues desde la base á la techumbre está hecha de madera de Ceroxylon andícola, de modo que bastaría raspar las columnas de la nave de ese modesto edificio para recoger la cera necesaria para los cirios del altar. Pobre es su interior; pero bajo su techumbre se reúnen los fieles animados de una fe viva y sincera. Aquel día mismo tuve una prueba de ello. El párroco decía misa, y como quiera que la iglesia fuera incapaz de contener á todos los feligreses llegados de las cercanías, un gran número de estos permanecían en la plaza hablando en alta voz con los vendedores allí instalados; pero cuando se tocó á alzar, callaron todos y se prosternaron en el suelo, sin faltar uno, quitándose los sombreros. Con el último campanillazo todos se levantaron, los que antes hablaban reanudaron el interrumpido coloquio, y la muchedumbre recobró la animación y el movimiento, cual si fuesen escolares en ausencia del maestro."

El traslado del poblado y por consiguiente, de la parroquia, se dio ante el riesgo que ocasionaba las constantes avenidas torrenciales del Río Quindío que ocasionaba daños en viviendas y cultivos en la primera aldea. El traslado del poblado termina cuando se cambia el nombre del poblado de Boquía por el de "Nueva Salento", según acta firmada en la fecha de 25 de enero de 1865. Más adelante el poblado cambia a "Villa de Nueva Salento" el 26 de noviembre de 1866.

La construcción del templo, ya más grande, se inicia a finales del siglo XIX, junto con la casa cural y el resto de viviendas que rondan la plaza principal, el templo era una construcción de bahareque entablado, tapia pisada y forrado en zinc. A raíz de un incendio ocurrido en 1930 que consumió una de las torres, el templo tuvo que ser demolido para luego iniciar uno nuevo con materiales resistentes y de buena calidad, el cual se advocaría a NUESTRA SEÑORA DEL CARMEN, desde ese momento es la patrona de los Salentinos.

La construcción del nuevo templo terminaría en la década de los 50 y fue restaurado en varias ocasiones, entre ellas en 1999 cuando a raíz del sismo de dicho año fue necesario realizar un refuerzo en su estructura. Posteriormente fue organizado por gestiones de los párrocos, grupos de oración y demás feligreses que lograron introducir nuevos vitrales, sillas y otros ornamentos que hoy están presentes en el templo.

La madrugada del sábado 17 de diciembre de 2022, la Iglesia resultó afectada tras un incendio que infortunadamente afecto el 15% de su construcción. Allí se destruyó una parte del techo del ala izquierda del templo y todo el sistema eléctrico, así mismo destruyó un vitral y dos ventanas, se afectaron algunas imágenes y esculturas religiosas, así como la pintura del interior de la iglesia. Con el apoyo de las entidades municipales, los organismos de socorro y de la comunidad, se logró habilitar en pocas horas el templo para las celebraciones de Navidad. A partir del febrero de 2023 se darán inicio a las obras de restauración del templo.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS:

BERRIO Martínez Ferney Antonio, Pbro. Diócesis de Armenia 50 Años de Historia. Primera Edición. Graficas Buda, Pereira Enero de 2003.

WIENER Charles. América pintoresca: descripción de viajes al nuevo continente por los más modernos exploradores. Editores Montaner y Simón, Barcelona 1884.

LÓPEZ Montes José Felipe, Pbro. Monografía de Salento (Departamento de Caldas), en Boletín de Historia y Antigüedades, Academia Colombiana de Historia Tomo XV. Pag. 464 - 475. 1923.

Documentos oficiales que se encuentran en el Archivo Histórico del municipio de Salento y en el Archivo del Despacho Parroquial de Salento.

ANEXO: LISTADO DE PARROCOS QUE HAN REGENTADO.

NOTA: Estas fechas son obtenidas de los libros parroquiales que están custodiados en el Despacho Parroquial.